Al menos 46 vacunas contra la COVID-19 están siendo probadas en ensayos en humanos en China y más de 20 en ensayos clínicos en el extranjero, a medida que el país impulsa su investigación y desarrollo de las vacunas a través de múltiples vías tecnológicas.

Entre ellas, tres vacunas monovalentes inactivadas diseñadas para neutralizar las variantes ómicron están siendo probadas para la inmunización secuencial en la parte continental, Hong Kong y los Emiratos Árabes Unidos, y estas pruebas están yendo adecuadamente.

Además, dos vacunas candidatas contra la COVID-19 basadas en mRNA desarrolladas a nivel nacional han demostrado su eficacia en ensayos preclínicos, lo que a su vez demuestra su potencial para pruebas en humanos, según un artículo publicado en junio en la revista Emerging Microbes & Infections.

El estudio ha demostrado que las dos vacunas, mRNA-Beta y mRNA-Ómicron, pueden inducir niveles altos de anticuerpos neutralizantes contra las variantes originales y múltiples del SARS-CoV-2, como la Beta, la Delta y la Ómicron.

Además, una vacuna de proteína recombinante desarrollada en China contra la COVID-19 ha demostrado ser segura y eficaz en la última etapa de los ensayos en humanos, según un estudio publicado en mayo en la revista The New England Journal of Medicine.

Esta vacuna tuvo una eficacia contra la COVID-19 de cualquier gravedad del 81.4 por ciento en el seguimiento a corto plazo y del 75.7 por ciento en el seguimiento a largo plazo.

Se han puesto en ensayos clínicos nueve vacunas multivalentes chinas contra las variantes de COVID-19, y algunas de ellas entran en la tercera fase, la última etapa antes de la aprobación para su comercialización.

Además, un grupo chino propuso una vacuna candidata contra la COVID-19 de nanopartículas de mosaico tetravalente que comprende proteínas de punta del prototipo SARS-CoV-2 y las variantes alfa, beta y gamma.

El estudio publicado en mayo en la revista Nature Communications reveló que esta vacuna candidata de nanopartículas había provocado anticuerpos neutralizantes equivalentes o superiores contra cepas variantes en ratones y primates no humanos con solo una pequeña reducción en los títulos de neutralización contra la cepa ancestral.

El desarrollo de vacunas de amplio espectro también está en trámite en China, según el grupo de investigación del mecanismo conjunto de prevención y control contra la COVID-19 del Consejo de Estado y otros equipos de investigación relevantes.

El país está desarrollando vacunas contra la COVID-19 dirigidas también a facilitar la entrega de medicamentos.

Se aprobó una vacuna contra la COVID-19 basada en vector de adenovirus tipo 5 en aerosol (Ad5-nCoV) administrada por inhalación oral para uso de emergencia entre poblaciones que han sido inoculadas con dos dosis de vacunas inactivadas durante seis meses.

Su dosis inhalable es solo una quinta parte de la inyección intramuscular y el ensayo clínico demostró que es segura y eficaz en adultos como inyección de refuerzo.

Hasta ahora, nueve vacunas contra la COVID-19 desarrolladas con diferentes rutas tecnológicas han obtenido la aprobación condicional del mercado o han recibido la luz verde para el uso de emergencia en China. Tres de ellas han sido incluidas en la lista de la Organización Mundial de la Salud de vacunas para uso de emergencia.

Fuente: Xinhua Español